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En los últimos años los créditos pequeños han vivido un auténtico auge, y no es para menos. ¿Te ha surgido un imprevisto con el que no contabas o simplemente quieres darte ese capricho que tienes en mente hace tiempo? Olvídate del papeleo, de las innumerables gestiones y de los requisitos de los bancos tradicionales, con los créditos pequeños online podrás disponer de financiación prácticamente al instante. Te contamos todas sus ventajas.

¿Qué son los créditos pequeños?

¿Tienes que hacer frente a un gasto, pero no es demasiado excesivo? Entonces, los créditos pequeños son tu mejor opción.

  • Se pueden solicitar cantidades realmente pequeñas, algo imposible en los créditos tradicionales.
  • No es necesario un aval, ya que al ser cantidades bajas el riesgo es mínimo.
  • Los plazos de devolución son más flexibles.
  • Son perfectos tanto para particulares como para empresas.

Ventajas de los créditos pequeños

Sin nómina, sin aval y en menos de 24 horas. Así son los créditos pequeños, una nueva forma de financiación que consiste en prestar pequeñas cantidades de dinero (incluso por debajo de los 1.000 euros) a amortizar también en breves plazos de tiempo (generalmente unos meses). Te contamos cuáles son algunas de sus ventajas. 

  • Sin papeleo: al tratarse de cantidades de dinero tan pequeñas, no se exige ningún tipo de documentación más allá del DNI o la cuenta bancaria. Tampoco hace falta aval.  Para que el cliente consiga la financiación suele bastar con ser mayor de 18 años, poseer una cuenta bancaria y un móvil para hacer los trámites. Ni siquiera importa que esté en el fichero de morosas, y el crédito se le concederá de todas formas.
  • Rapidez: el proceso de solicitar este tipo de financiación online es rápido y sencillo. Una vez que el usuario solicita el crédito podrá disponer de él en tan solo unas horas. El procedimiento es prácticamente instantáneo, más rápido que cualquier otro tipo de financiación, y esta es una de sus principales ventajas. 
  • Confidencialidad: podrás disponer del dinero sin necesidad de dar explicaciones sobre para qué lo quieres. Además, todos tus datos estarán protegidos y nadie dispondrá de ellos.
  • Flexibilidad: este tipo de producto se puede personalizar en base a las necesidades de cada cliente. Es uno mismo el que elige la cuantía y el plazo de devolución según lo que más le convenga.
  • Financiación 365 días al año: aunque sea fin de semana o festivo, los créditos pequeños se pueden solicitar en cualquier momento sin importar la hora o el día del año que sea. En este caso, el dinero siempre está disponible.
  • Tramitación online: ni siquiera tendrás que moverte del sofá para solicitar la financiación. Lo único que necesitas es un dispositivo con conexión a internet y en unas horas tendrás el dinero en tu cuenta bancaria.

 

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